Las presiones inflacionistas aumentan con el encarecimiento de los productos básicos

BIS Quarterly Review  | 
14 de marzo de 2011

En el periodo comprendido entre principios de diciembre de 2010 y la última semana de febrero de 2011 las cotizaciones bursátiles subieron y los diferenciales de rendimiento se estrecharon en las principales economías avanzadas. Los inversores descontaron un fortalecimiento de la actividad económica y una creciente probabilidad de que la recuperación por fin hubiera tomado su rumbo en esas economías. Los rendimientos de la deuda pública también aumentaron considerablemente, lo que refleja la combinación de expectativas de mayores rendimientos reales al anticiparse un endurecimiento de la política monetaria, y una mayor inflación esperada. Durante la última semana de febrero, sin embargo, la confianza de los inversores sufrió un duro revés, conforme crecía la preocupación por las consecuencias de la agitación política en África del Norte y Oriente Medio.

El aumento de las expectativas de inflación, especialmente a corto plazo, se debió no sólo a las mejores perspectivas de crecimiento, sino también a los rápidos incrementos de los precios de las materias primas agrícolas y de otros productos básicos, en particular alimentos. Esto renovó la preocupación entre inversores y autoridades económicas por el impacto inflacionista del encarecimiento de los productos básicos en todo el mundo y sus posibles efectos inducidos. A ello se sumó la rápida escalada de los precios del petróleo ante las crecientes tensiones políticas en África del Norte y Oriente Medio.

Las cotizaciones bursátiles y los precios de la deuda en diversas economías de mercado emergentes comenzaron a reflejar la creciente preocupación de los inversores por los efectos de un endurecimiento de la política monetaria ante el aumento de la inflación. Además, las cambiantes perspectivas mundiales indujeron a los inversores a reajustar geográficamente sus carteras, lo que se tradujo en salidas de capitales desde los mercados bursátiles de Asia y América Latina y entradas en los de las economías desarrolladas.