Los mercados de divisas
La amplia y sostenida depreciación del dólar estadounidense y su posterior reversión parcial fueron las características más destacadas de los mercados de divisas. En 2004, el dólar volvió a depreciarse frente al euro, el yen y una serie de monedas con tipo de cambio flotante. La novedad el año pasado fue que el dólar también perdió terreno frente a numerosas monedas de economías de mercado emergentes de Asia. Sin embargo, desde enero de 2005, se ha invertido en parte su tendencia a la baja. Las oscilaciones cambiarias parecen haber estado dirigidas por tres factores clave: la atención prestada por los agentes del mercado a la ampliación del déficit por cuenta corriente en Estados Unidos y a los rumores de cambios en la composición de divisas en las carteras de los bancos centrales asiáticos; el cambio de expectativas sobre el crecimiento relativo del producto y la evolución de los tipos de interés; y la acumulación de reservas oficiales de divisas en Asia.
En una sección de este capítulo se analiza si los patrones de las balanzas por cuenta corriente y de la composición de divisas en las carteras mundiales plantean problemas para el sistema monetario internacional.