Aspectos más destacados de las estadísticas internacionales del BPI

BIS Quarterly Review  | 
9 de marzo de 2014

Los bancos declarantes al BPI redujeron sus activos transfronterizos en el tercer trimestre de 2013, sobre todo las posiciones frente a bancos, que fueron las que más se contrajeron desde el segundo trimestre de 2012. Los ajustes de las posiciones intragrupo fueron los responsables de gran parte de esta disminución en el crédito interbancario. El crédito transfronterizo a entidades no bancarias también disminuyó, sobre todo el concedido a prestatarios de Estados Unidos y la zona del euro. Entre las regiones declarantes, solo en las economías de mercado emergentes y Japón se produjo un incremento del crédito transfronterizo a sus residentes. Los activos frente a centros extraterritoriales permanecieron prácticamente iguales. Este artículo contiene dos recuadros. El primero analiza los recientes cambios en la actividad interbancaria internacional. El segundo trata sobre el papel de la inversión transfronteriza en el mercado mundial de valores.

La financiación interbancaria internacional se vio seriamente dañada por la crisis financiera de 2007-09 y las consiguientes tensiones financieras en la zona del euro. Los préstamos interbancarios transfronterizos (incluidas las posiciones intragrupo) pasaron de 22,7 billones de dólares a finales de marzo de 2008 a 17 billones a finales de septiembre de 2013. Los bancos con sede en la zona del euro concentran más de dos tercios del descenso total y los bancos suizos representan la mayor parte del resto.

Los mercados de deuda mundiales alcanzaron una cifra estimada de 100 billones de dólares a mediados de 2013, frente a los 70 billones registrados a mediados de 2007. Los gobiernos (definidos en sentido amplio como el conjunto de administraciones centrales, estatales y locales) han sido los mayores emisores de deuda. El nivel de títulos de deuda pública alcanzó los 43 billones de dólares en junio de 2013, aproximadamente un 80% más que a mediados de 2007. La emisión de deuda por parte de entidades no financieras creció a un ritmo similar, aunque partía de un nivel más bajo. Las emisiones de entidades financieras crecieron menos.

Los no residentes mantuvieron aproximadamente una cuarta parte del nivel de títulos de deuda, mientras que en 2007 mantenían un 29%. Esta caída sugiere que el proceso de diversificación internacional de carteras puede haber dado marcha atrás parcialmente desde que estallara la crisis, aunque podría ser algo transitorio. Los últimos datos de la ECIC del FMI indican que las inversiones transfronterizas en títulos de deuda se recuperaron ligeramente durante el segundo semestre de 2012, que es el periodo más reciente para el que se dispone de datos.